Con la aprobación de Alex (que no yo) para ser mi 'muso' (que no Musso) he aquí que presento lo que hace un par de meses he escrito en una invernal noche de primavera, larga y solitaria; que no por fría deja, en ocasiones, de prolongarse hasta ulteriores y más cálidas estaciones:
Siempre (que) vuelves
Paréceme que es siempre,
pero apenas ha una vez
que regresas, que llenas el vacío
y reviertes su contenido
hacia tu lado.
····Ayer pudiste haber venido;
pero no, debió ser en días mas lejanos.
En tiempos en que la orfandad
solía llenarse con la única visita.
Luego, vaciarse el derroche
en constante derrame
cuando tu retiro.
Constante hacia la infinitud de hoy.
····La tarde en que te fuiste entonces...
siempre vuelve, y sueño que partes siempre.
Y tu constante retirada
me dice que aún no te has ido.
(Tu eterna llegada
me dice que siempre
espere tu regreso).
····Pero si lloro de desconsuelo
sé que escucho el eco de mi oquedad,
que todo tacto es mío,
que el loco acto se acabó.
Y mi pecado está en la fe,
que siempre mi frente ha aferrado,
pues poca es mi fe de afanar.
Marzo de 2006.
Así es. No háy más culpa que la propia. ¿Te acuerdas de "Time will say nothing but I told you so"? Me acuerdo de eso.
ReplyDeleteGran poema.
Si (sic) pudiera decírtelo, te lo haría saber... pero como no es así, sólo me queda suponer, y querer creer: en lo que digo, como en que la incertidumbre nos hace más humanos. Y ahora esto a mí me recuerda a Goethe: (sic) ¡Salve la incógnita, suprema esencia que barruntamos! THANX.
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